¡HABLEMOS DE ELLO!


Familia
3/03/2021
El tiempo pasa sin que nos demos cuenta y de repente… ¡los niños ya son mayores! Si quieres estar preparada para tratar con ellos temas tan delicados como el amor o el sexo, sigue leyendo.

Cuando menos te lo esperas, la ves, a tu hija... ¡besando a un chico! Y piensas... ¿Ya? ¿Y ahora qué hago? Aquí tienes unas pautas básicas para guiarte y afrontarlo de la mejor forma.

Ten en cuenta que los adolescentes de hoy en día están rodeados de actualidad por los cuatro costados. Detente un momento y analiza lo siguiente: ¿qué programas o películas ve en la televisión? ¿y en el cine?.

Observa los videojuegos o las vallas publicitarias de vuestro entorno. Aprovecha para usarlo como "momentos de enseñanza" para que tus hijos aprendan valores, y les sirva de orientación sobre el amor y el sexo. Podéis estar viendo un anuncio de jabón juntos, o escuchando música en el coche, y encontrarás contenido sexual o de amor. Aprovecha estos momentos y háblales de estos temas.

Asocia sexo y valores

Los expertos están de acuerdo en que los adolescentes no necesariamente quieren solo información teórica, sino que también necesitan que les hables de tus creencias y tus propios valores. Introduce la responsabilidad y la ética en el contexto de tu vida o creencia personal, y asegúrate de que tus hijos comprenden que las relaciones sexuales se basan en el cariño, el afianzamiento de una pareja, la responsabilidad y la preocupación por ambas partes.

¡Estoy enamorada!

Debes ser consciente y respetar el hecho de que tus hijos también se enamoran. Cuando tu hija de 13 años te dice que está enamorada, debes tomártelo en serio. No ofendas sus emociones diciéndole que son tonterías, porque en ese caso lo único que conseguirás es que perciba que no tienes en cuenta, no sólo ese sentimiento, sino también todos los demás. Que no la escuchas y que piensas en ella como tu niña pequeña con coletas.

Te aconsejamos que hables de sexualidad con tus hijos de una forma lo más informal que puedas. Facilítales que compartan sus sentimientos contigo, préstales atención y comparte tus experiencias y consejos. Los niños aprenden mucho más de los padres a través de las historias que les contamos, y en ese proceso, además refuerzan sus creencias, su moral y sistema de valores.

Promueve un comportamiento responsable

Una vez que estés segura de que tu hijo o hija es sexualmente activo, no debes castigarle. Debes aceptar esta nueva situación en vuestras vidas, y ayudarles a que mantengan comportamientos responsables y maduros. Háblales de los cambios en su cuerpo, edúcales sobre embarazos, anticonceptivos y explícales los riesgos. No te olvides de programar una visita al ginecólogo.

Construyendo autoestima

Otro punto importante que los padres deben tener en mente, es su responsabilidad para hacer que sus hijos crezcan teniendo confianza en sí mismos. Los adolescentes que no se valoran y no se sienten admirados y apreciados en su entorno familiar son completamente conscientes de este hecho, y normalmente comienzan a ser sexualmente activos a edades más tempranas. Buscarán amor y atención en otros lugares y creen que una forma fácil de encontrarlo es a través del sexo.

Conoce su mundo

Hazles saber que estás ahí sin que se sientan cohibidos e inhibidos. Sé una figura presente y constante en sus vidas. Olvida los mitos de que madres e hijas son mejores amigas, no se trata de eso ya que puede ser peligroso para vuestra relación. Tú eres la madre y como tal, debes ser la que establezca los límites.

Descubre qué le interesa y qué hace en su tiempo libre, porque por muy poco que te cuente, ¡aprenderás un montón! Facilítales que abran sus pensamientos, incluso cuando parecen taciturnos... ¡y olvídate de darte por vencida!

Hablar con un adolescente sobre sexualidad no es un tema que debas dejar pasar hasta que te des cuenta de que tu hija o hijo está enamorado. Realmente no hay una ocasión determinada que tomar como señal para hablar de ello... Intenta que poco a poco sea algo integrado en la dinámica de tu familia.